La escultura finalmente está terminada e inaugurada con una sencilla ceremonia en la que participaron los representantes de asociaciones culturales de los cuatro pueblos de los croatas de Molise: Kruč, Mundimitar, Filič y Tavela. Paolina Ferrante, presidente de la asociación cultural Luigi Zara, de Filič, fue la promotora de esta iniciativa.
¡Entre las colinas de Molise ha aparecido una embarcación! ¿Cómo es posible? ¿Qué hace una embarcación en un bosque, entre valles y colinas en las que no hay ningún río…? Dicen que hace mucho tiempo servía como medio de transporte a mucha gente que se asentó en estos territorios de los Apeninos.
Los pueblos croatas de Molise, unidos por su origen común que marcó la historia de diferentes lugares en la región de Molise, recientemente han finalizado la iniciativa que para ellos es de gran valor histórico y cultural, y que es confirmación de su identidad: la colocación de una escultura alusiva que representa la réplica de la embarcación mencionada. El artefacto simboliza el cruce del mar Adriático desde la costa oriental hacia la occidental en la que sus antepasados llegaron en los siglos XV y XVI.
Las limitaciones impuestas por la pandemia de Coronavirus produjo el retraso de las obras de este valioso proyecto. Después de varios meses de espera, la embarcación estuvo lista, lo que fue celebrado recientemente con una ceremonio sencilla, de la que participaron los representantes de las asociaciones culturales de los cuatro pueblos reconocidos de los croatas de Molise: Kruč, Mundimitar, Filič y Tavela. Paolina Ferrante, presidente de la asociación cultural „Luigi Zara“, de Filič (que lleva el nombre de su difunto esposo) fue la iniciadora de esta iniciativa, y ocupó un lugar especial en la delegación, con todo derecho. La motivación del proyecto era crear algo como recuerdo permanente de la participación de dicha asociación en la „Maratón de embarcaciones“ en el río Neretva, durante años, y cuya tripulación era de Molise. Cabe mencionar asimismo la renovación histórica del cruce del Adriático llevada a cabo en 2010 con una embarcación que partió del Neretva rumbo a la costa de Molise, a través del Adriático.
Justamente para destacar la relación creada con los hermanos croatas y la historia de la comunidad que todavía está presente en Molise, Paolina Ferrante y sus amigos quisieron crear un monumento en forma de barco también como recuerdo tangible de este territorio de Molise, de esta tierra que ya hace más de cinco siglos fue testigo de la llegada de habitantes del otro lado del mar, que aquí recibieron refugio y fueron bienvenidos.
La asociación „Luigi Zara“ y su presidente no estuvieron solos en esta iniciativa. Es más, enseguida recibieron el apoyo y la colaboración de todas las asociaciones que, junto con la asociación „Luigi Zara“, conforman la „Unión de asociaciones culturales de los croatas de Molise“, a saber: la Fundación Agostina Piccoli, las asociaciones Most, de Mundimitar; Hrvatski otok u Moliseu y Naš živok, de Kruč; Stara zemblja, de Tavela. Los representantes de dichas asociaciones y de sus pueblos fueron Paolina Ferrante, Antonio Sammartino, Corrado Lentilucci, Donato Manuele, Ivano Zara y Simone Spadanuda, quienes estuvieron presentes en la cremonia en la ruta provincial 158 Castellelce, donde está ubicado el monumento.
La importancia del evento debía contar con la presencia de autoridades italianas y croatas, y de instituciones regionales y locales. Lamentablemente, en estos tiempos de coronavirus fue necesario decidirse por una ceremonia sencilla, pero ni bien se den las condiciones, se organizará una ceremonia de inauguración para un público más numeroso y en presencia de autoridades institucionales.
Este monumento reproduce fielmente a una embarcación típica del valle del Neretva, zona de origen de los croatas de Molise. La embarcación del Neretva tuvo en la historia un rol económico y de relación con el mundo exterior y la población de la región. Durante siglos, le embarcación fue el medio de transporte principal de esa gente. Por eso, cada año se organiza en el Neretva la carrera amateur de estas embarcaciones tradicionales. Los participantes compiten con barcos sobre el río Neretva, desde Metković hasta Ploće, a 22,5 km. Participan de la carrera cuarenta equipos y cerca de setecientos remeros; es lindo recordar que, entre esos equipos, durante un par de años seguidos, estuvo el de Molise. En esta carrera de prestigio, ganar no es lo más importante. Es importante el valor y el fuerte deseo de seguir con la tradición, de recordar la vida y el sacrificio de nuestros antepasados. Por eso, no existe mejor símbolo de la patria de los ancestros de los croatas de Molise. Junto con su idioma, por supuesto.
La réplica de la embarcación, colocada en el centro del cruce vial Castellelce, incluye dos frases que recuerdan el momento histórico del cruce del mar Adriático y la llegada de la nación dálmata a estos montes de Molise, renovando la tradición oral mantenida hasta nuestros días, que es la llegada de los croatas a Molise desde „la otra orilla del mar“ („iz one bane mora“). Por eso, debajo de la réplica se encuentra la frase en lengua croata antigua de Molise: «ODE SU DOL ČELJADE IZ ONE BANE MORA»; y en italiano: «QUI GIUNSERO LE GENTI DALL’ALTRA PARTE DEL MARE».
La embarcación se encuentra en un lugar desde el que no puede verse el mar (!!)… pero el recuerdo a las olas marítimas que acompañaron una navegación difícil y peligrosa son representadas a través de grandes rocas sobre las cuales descansa; son rocas de la costa este del Adriático que la gente de Molise recuerda a través de cuentos y leyendas de sus ancestros.
Incluso la elección del lugar en el que descansa la obra no es casual… En realidad, la construcción de la rotonda en aquel lugar y en aquel momento casi podría decirse que es un signo del destino, es el cruce natural que en varios sentidos lleva hacia los pueblos de los croatas de Molise. No existen datos históricos en ese aspecto, pero es muy probable que los emigrantes dálmatas llegados del mar hayan ido junto al río Trigno y luego a través de los valles hacia las colinas de los Apeninos, para llegar hasta el lugar en el que se asentaron. Esta embarcación, orientada hacia el mar, se encuentra en el cruce de caminos que nuestros antepasados dálmatas cruzaron valientemente al encuentro de una nueva vida.
La asociación Luigi Zara agradece especialmente a la Administración de la región de Campobasso, que cedió el lugar para colocar la réplica de la embarcación, dando de esa manera su apoyo para las necesidades de la comunidad y confirmando que desea colaborar con esta iniciativa cultural. También agradecen al estado croata, especialmente a la Oficina central gubernamental para los croatas fuera de Croacia y su director, el secretario de Estado Zvonko Milas, que dio su apoyo financiero a la comunidad croata de Molise para este proyecto.
Reunidos frente al monumento y satisfechos con la realización de este proyecto, los participantes se saludaron con al esperanza de que este símbolo de la presencia croata en Molise permanezca viva durante los próximos quinientos años.
Texto: Antonio Sammartino