El emérito Bernard M. Luketich, presidente de la UFC (Cokeburg, 17. 8. 1931 – Pittsburgh 8. 12. 2015) fue iniciador de la Federación Nacional de los croatas de EE.UU., de la Asociación empresarial croato-americana de la ciudad de Pittsburgh, y de muchas otras asociaciones valiosas y proyectos sociales. Desde 1978 y durante 36 años, fue elegido nueve veces presidente de la organización fraternal croata más antigua, a través de elecciones democráticas.
Nos dejó para siempre un gran amigo y gran hombre, de características excepcionales tanto humanas como laborales, un gran enamorado de sus dos patrias: los EE.UU. y Croacia.
El director de la Fundación para la Emigración Croata y todos los empleados de la misma envían sus profundas condolencias a su esposa Martha, sus hijas, yernos y nietos, y a todos los miembros de la UFC, admiradores y amigos de Luketich y su obra. También envían su pésame numerosas familias croatas y todos aquellos que han sentido la necesidad de hacerlo a través de la Matica, a quienes esta persona de bien y de gran corazón siempre dio ayuda y regaló una sonrisa.
El emérito Bernard M. Luketich, presidente de la UFC (Cokeburg, 17. 8. 1931 – Pittsburgh 8. 12. 2015) nació en los EE.UU. Fue un destacado trabajador en el campo social y cultural, publicista y editor, demostrando ser uno de los personajes líderes del campo intelectual en la diáspora croata actual en el continente norteamericano. Desde 1978 y durante 36 años, fue elegido nueve veces presidente de la organización fraternal croata más antigua, a través de elecciones democráticas. La fórmula mágica del éxito de la comunidad fraternal en el concepto de Luketich fueron los programas creativos en el campo cultural, educativo, deportivo y humanitario que puso en marcha durante la segunda mitad del siglo XX, y cuyos efectos positivos son disfrutados hoy en día por los numerosos miembros en los EE.UU., Canadá y Croacia. Luketich fue fundador de la Federación cultural juvenil de la UFC, que durante sus festivales anuales demuestra, desde 1966, la obra de más de cincuenta mil músicos, cantantes y bailarines que nutren el idioma croata, la cultura, el patrimonio musical y la danza.
Fue iniciador de la Federación Nacional de los croatas de EE.UU., de la Asociación empresarial croato-americana de la ciudad de Pittsburgh, y de muchas otras asociaciones valiosas y proyectos sociales. Trabajando durante toda su vida por la unidad de la nación coata, la adquisición de la centenaria organización de apoyo de la Comunidad Católica Croata en Chicago, en 2006, fue un acierto empresarial. Por la innovación de los programas de fraternidad recibió una condecoración que lleva el nombre del fundador de dicho movimiento social americano, John Jordan Upchurch, entregado por el Congreso de la Fraternidad en Pennsylvania, en 2003. Cumplió con cargos ejecutivos en el Congreso Fraternal Nacional de los EE.UU. La Tamburitzans Association of America le entregó un premio por sus logros musicales en 1983. Desde 1952 hasta 1954 luchó como soldado americano en Corea. Fue condecorado repetidas veces por parte de la República de Croacia y de los EE.UU.
El secreto del carisma de Luketich residía en una articulación clara de la visión que prometía el éxito de la Unión Fraternal Croata. Establecía grandes expectativas ante los constructores voluntarios durante las campañas, y expresaba la firmeza de que nuestra gente podía hacerlas realidad. De esa manera, Luketich aumentaba la autoconfianza y el orgullo de las raíces croatas, la cultura y la fe de nuestro pueblo croata. Con sus palabras y obras logró obtener grandes valores para la Fraternidad y sus miembros en cuanto a la renovación de hogares culturales croatas con sus contenidos sociales y culturales, y el patrimonio escrito en las páginas de la publicación oficial Zajedničar, la biblioteca en la Oficina Central, y la colección de obras de arte, junto con una colección etnográfica de los croatas de los EE.UU.
El presidente Luketich se reunió con los personajes más influyentes de su tiempo en los ámbitos político, cultural y religioso, así como con los (recién llegados a EE.UU.) trabajadores y sus familias necesitadas.
La Unión Fraternal Croata de los EE.UU. es una asociación de apoyo, seguro, no ganancial, de la emigración croata en dicho país y Canadá, y es una organización significativa tanto humanitaria como patriótica. Fue fundada hace 120 años en Pittsburgh. Con menos de 330 miembros en 1894, hoy prácticamente cuenta con 100 000 miembros voluntarios. Su propiedad se valúa en cerca de 400 millones de dólares.
Al referirse a Bernard M. Luketich, las ganancias empresariales y sociales confirman que se trata de un líder étnico incuestionable que, en los últimos nueve mandatos, transformó a la UFC en una empresa gigante que se enorgullece de su propia filantropía en las comunidades emigrantes locales y en su madre patria, Croacia.
La fraternidad americana pertenece a uno de los movimientos sociales más fuertes en la historia de los EE.UU. Su programa cubre el seguro personal y familiar en caso de enfermedad o muerte. En el marco de las asociaciones fraternales se desarrollaron las actividades sociales, culturales, humanitarias y deportivas. En la era moderna, la gente se integra a organizaciones fraternales, no por el seguro cuya industria se ha desarrollado ampliamente, sino porque dichas organizaciones en la era de la globalización constituyen una guía confiable hacia las raíces étnicas y cultuarles. A través de ellas se envía ayuda material, humanitaria y política al pueblo en la antigua patria.
Durante la agresión a Croacia por parte del Ejército comunista yugoeslavo en septiembre de 1991, se llevaba a cabo la 18° Convención Nacional de la UFC en Las Vegas, Nevada. Durante sus discursos, los delegados condenaron el ataque bárbaro a Croacia, al igual que la posterior resolución. Durante la convención se inició la fundación del Fondo Humanitario Croata al que se le asignaron 50000 dólares, y los delegados reunieron allí mismo 6000 dólares. El Fondo Humanitario Croata se estableció como una acción permanente de la comunidad para la ayuda a la Patria. En cada número del vocero Zajedničar se publicaron los nombres de todos los donantes. La comunidad asmismo organizó campañas para recolectar remedios, alimentos, material médico, ropa y otros artículos. El primer presidente electo democráticamente en Croacia, Franjo Tuđman, expresó su agradecimiento al presidente Bernard M. Luketich y a los hermanos y hermanas de todas las secciones de dicha comunidad por la ayuda prestada en la lucha de los croatas por su estado independiente. Desde 1991, la comunidad también colabora generosamente con la organización humanitaria DORA para los niños víctimas de la Guerra por la Independencia, que comenzó un grupo de humanitarios en la Fundación para la Emigración Croata. Gracias a la agilidad de Luketich, rápidamente se creó una red de padrinazgos para 674 niños – huérfanos de guerra, que la comunidad apoyó hasta los 18 años cumplidos. Del fondo humanitario de la UFC para DORA se abonó un total de 1.266.947 dólares. Cabe destacar que también ayudaron aquellos más humildes, que vivían en barrios obreros en EE.UU. y Canadá.
La educación de los jóvenes es uno de los objetivos centrales de la comunidad de la época Luketich, que se hace realidad desde hace 58 años a través de la Fundación de Becas de la UFC. Hasta la actualidad, los bienes de la Fundación Escolar del Fondo Común y el Fondo de fundaciones especializadas creció continuamente y posibilitó un promedio de 250 becas entregadas anualmente. Se trata de un programa educativo de gran calidad, el mejor en la historia de la emigración croata, desarrollado constantemetne por Luketich durante las campañas de Navidad. Es increíble el hecho de que el presidente de la Fundación Escolar no sea miembro del recientemente formado Consejo gubernamental para los croatas en el exterior.
La mayor cantidad de miembros de la UFC obra tradicionalmente en Pennsylvania, Ohio, Illinois, California, y en Ontario, Canadá. Pittsburgh, Cleveland, Chicago, Los Ángeles y Toronto pueden considerarse centros contemporáneos de la fraternidad.
Desde los comienzos del siglo XXI, seis secciones se fundaron en Croacia, por iniciativa de Luketich: se trata de la sección 2000 en Zagreb, la 2001 en Ogulin, la 2004 en Koprivnica, la 2005 en Rijeka, la 2006 en Split y la 2007 en Županija.
Es sorprendente la facilidad con la que Luketich durante décadas manejó con su carisma el gran capital social de la comunidad, a pesar de los cambios sociales y tecnológicos, las turbulencias económicas, y la revolución en las tecnologías de la comunicación – que en gran medida cambiaron las formas de reunión social de la humanidad contemporánea. Además, ya con el solo cambio generacional desde la post guerra (Primera y Segunda Guerra Mundial, y la Guerra por la Independencia) hacia las generaciones nacidas en EE.UU. y Canadá en el mundo anglosajón desarrollado – también cambiaron y se enriquecieron las costumbres sociales y culturales de los croatas americanos que hábilmente incluía a la casa matriz de la comunidad. Solo queda un agradecimiento sincero a Bernard M. Luketich por la amplitud de su obra, y un deseo de descanso eterno en paz.
Como símbolo de compromiso, continuaremos respetando esta valiosa red social de la Unión Fraternal Croata de EE.UU., para el bien de sus miembros de nuestros países amigos EE.UU., Canadá y Croacia, en el marco del sector civil contemporáneo, y con el viejo slogan: All for one – one for all! / ¡Todos para uno – uno para todos!
Texto: Vesna Kukavica